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2006/01/24

Una reposición sólo comprensible desde la nostalgia

Ahora que en España asistimos a un momento audiovisual de eflorescencia orientalista, que abarca desde el cine (Kitano, Kar-Wai, Kim Ki-Duk) hasta el dibujo animado (Shin-Chan, Chihiro y demás “anime”), pasando por el comic (el ineludible Manga) o cualquier otra forma de expresión artístico-espiritual (Feng Shui, Tai Chi y demás cacofonía), parece sorprendente que una de nuestras privadas se deje caer con la reposición de uno de los más tristes engendros audiovisuales asiáticos de los últimos años: me refiero a la reemisión, en Cuatro, del programa “Humor Amarillo”, en horario matinal de fin de semana. Y es que, ciertamente, había mucho para escoger, antes que este producto cuya reposición resulta difícilmente comprensible si no es desde la nostalgia. Por mucho que algunos se empeñen en adecentar el producto, aduciendo que en él se sitúa la génesis del posterior talento de Takeshi Kitano (sí, en efecto él era el general Takeshi), resulta incontestable que, primero, se trata de un programa absolutamente infumable (ya digo, desde el planteamiento de un espectador medio, con suficiente espíritu crítico y una aceptable capacidad de discernimiento), y, segundo, y lo que es más grave, resulta totalmente denigrante para los ciudadanos asiáticos. El propio nombre del programa es claramente ofensivo, pero no menos que los comentarios xenófobos perpetrados por los radiadores de la versión española (Chino Cudeiro y compañía), algunos de ellos todavía pululantes en la radiofrecuencia nacional. Estoy cansado de escuchar las furibundas y reiteradas críticas contra la publicidad y la televisión por parte de todo tipo de asociaciones de defensa de los derechos civiles, empezando por las que enarbolan la bandera de la no discriminación sexista en anuncios de champús y terminando por las que abogan por la defensa del chinchorro volador, pero en todos los años que duró este programa no escuché ni una voz crítica contra “Humor amarillo”. Mucho me temo que asistiremos a la emisión de los 100 capítulos por la Cuatro sin que nadie interrumpa este silencio. Si se tiene claro, la cosa resulta más sencilla: más o menos educado, más o menos correcto, lo cierto es que todos llevamos un racista dentro.

1 comentario:

danicurri dijo...

no me jodas que han vuelto a reponer "Humor Amarillo"??Yo me lo tragaba con 10 añitos, pero ahora colega, no hay quien lo aguante; ya sólo falta la reposición de "pressing catch" y de "Verano Azul".hay que joderse. luego les extrañará que vayan los últimos en share.